La sonda japonesa Hayabusa II

De Descubriendo la Física
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Después de 4 años de viaje, la sonda japonesa Hayabusa II resultado de una colaboración entre la agencia espacial japonesa, Francia y Alemania, llegó este 22 de septiembre a un diminuto asteroide identificado por el número 162173, y denominado Ryugu, depositando sobre su superficie dos minirobots y quedando en órbita a 20 km de su susperficie.

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Los minirobots (rovers) fueron arrojados desde la sonda, que se acercó a a 50 m de la superficie, y debido a la pequeñisima gravedad del asteroide, que tiene aproximadamnente 1 km de diamétro, tardaron más de una hora en llegar a su superficie, sin sufrir daños. Estos dispositivos poseen la forma y tamaño de una lata de conservas, no tienen ruedas y se mueven dando pequeños saltos, debido a que poseen un contrapeso que se controla eléctricamente que los desequilibra, y están cubiertos de celúlas fotoeléctricas, camaras de filmación y sensores. Otros tres rovers se harán llegar a la superficie proximamente lo que permitirá analizarentre otras cosas la composición de suelo.

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Para tomar muestras del suelo del asteroide la sonda posee otros dispositivos, entre ellos un impactador de varios kg que se disparará contra el suelo produciendo un pequeño crater que permitirá recoger muestras de capas más profundas. Ryugu es un tipo básico de asteroride denominado C, muy poco afectado por el entorno espacial y por la temperatura y que según se estima debería contener minerales hidratados y orgánicos. El objetivo de la misión es buscar respuestas al origen y la evolución del Sistema Solar y por ello estudiar estos asteroides puede pemitir avances en el tema. Esta misión emprenderá el regreso en 2019 según se planificó, llegará a la Tierra en 2020 dejando caer las muestras dentro de una pequeña cápsula en el desierto de Australia.

Ryugo fue descubierto recién en 1999 y forma parte de un conjunto de alrededor de 1500 asteroides, que forman el grupo Apollo. Estos asteroides pueden acercarse peligrosamente a la Tierra y hasta impactar con ella. Este es el caso de lo ocurrido hace 5 años en Clelyabinski, Rusia, con un asteroide de este grupo. A partir de ese momento se vio la importancia de estudiarlos y seguir sus momvimientos. En una misión anterior, Hayabusa 1, en 2003, y despues de un viaje sumamente accidentado, se consiguió extraer muestras del asteroide Itokawa y regresar a la Tierra. Esta fue la primera misión dirigida capaz de obtener muestras de un asteroide.


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